MIRAR
En otros tiempos, cuando alguien era elegido Obispo de Roma y todavía se le daban títulos históricos como Vicario de Cristo Jesús, Sucesor del Príncipe de los Apóstoles, Sumo Pontífice de la Iglesia Universal, Primado de Italia, Arzobispo y Metropolita de la Provincia Romana, Soberano del Estado de la Ciudad