Félix Cortés Camarillo ganó en un instante el interés, la simpatía del señor Emilio Azcárraga Milmo. Hombre joven, sencillo, respetuoso sin pizca de cortesanía que le ofrecía resolver problemas. En ese instante la divulgación -transmisión- de los funerales de don Eugenio Garza Sada. Amplia difusión y presencia de las voces