Las conductas de riesgo al volante continúan siendo una amenaza latente para automovilistas y peatones en la ciudad. De acuerdo con estadísticas de la Dirección de Tránsito y Vialidad Municipal correspondientes al mes de septiembre, el exceso de velocidad y la conducción en estado de ebriedad encabezaron las causas de los accidentes registrados en ese periodo.
En total se reportaron 73 percances viales durante el mes, con un saldo de 11 personas lesionadas y 3 fallecidas. Las cifras oficiales revelan que 15 de estos accidentes estuvieron relacionados con manejar a exceso de velocidad, mientras que 9 se vincularon directamente con el consumo de alcohol.
A estos factores se suma otro elemento preocupante: la falta de documentos. En 16 casos, los conductores responsables no contaban con licencia, lo que refleja una carencia de control y cultura vial.
Las autoridades también destacaron un aumento en el número de conductores que huyen tras provocar un choque. En siete percances de septiembre, los responsables abandonaron vehículos de procedencia norteamericana sin placas, lo que complica su identificación y limita la aplicación de sanciones.
Oficiales de Tránsito advirtieron que estas conductas no solo generan pérdidas materiales, sino que están costando vidas humanas. Reiteraron el llamado a la población a manejar con responsabilidad, respetar los límites de velocidad y evitar conducir bajo los efectos del alcohol.
“Evitar la imprudencia al volante no solo previene accidentes, sino que salva vidas”, enfatizó un oficial vial.