La transición hacia una logística verde en la frontera da un paso concreto: cinco camiones eléctricos Windrose R700 comenzarán a operar la primera ruta binacional entre Laredo, Texas – Puente Colombia – Monterrey, como parte del corredor eléctrico implementado por GreenSpace E-Mobility.
La empresa confirmó que ya se realizaron pruebas de operación en Laredo y que las primeras unidades circulan en modo piloto-demostración, antes del despliegue total previsto para la fase 1 del proyecto.
Este corredor constituye el primer intento formal por electrificar un tramo de alto volumen comercial en el norte del país y por integrarlo con la infraestructura de Texas.

¿Por qué el tramo Laredo–Colombia–Monterrey es clave?
La ruta que seguirá el piloto —Laredo → Puente Colombia → Monterrey— coincide con uno de los corredores con mayor crecimiento industrial y de nearshoring.
- Por el Puente Colombia cruza parte del flujo más dinámico de manufactura y exportación.
- Monterrey consolida más de 40 mil millones de dólares en nearshoring desde 2022.
- Laredo canaliza más de la mitad del comercio total México–Estados Unidos.
La integración de cargadores de alta potencia, estaciones de servicio y herramientas de monitoreo digital será la columna vertebral del sistema.

Los camiones Windrose R700: Lo que aportan a la logística
Los documentos técnicos revisados confirman que el Windrose R700 es uno de los camiones eléctricos más avanzados actualmente en fase de introducción:
- Batería de 729 kWh con arquitectura 800V
- Carga ultrarrápida (megawatt-level): 20% a 97% en 38.6 minutos, validado en pruebas de Sinexcel
- Autonomía estimada: entre 430 y 530 km por carga (según condiciones)
- Torque instantáneo y tracción optimizada para Clase 8
- Cabina digital con paneles duales, navegación 3D y telemetría avanzada
- Aerodinámica refinada: coeficiente de arrastre 0.2755
El ingreso del primer Windrose a Laredo —confirmado por GreenSpace en redes sociales— marca el inicio real del proyecto.
Prueba Stockton–Laredo: El recorrido que puso a prueba al Windrose R700
Antes de anunciarse oficialmente el corredor eléctrico Laredo–Colombia–Monterrey, el fabricante Windrose Technology realizó una prueba clave para validar la capacidad real de su camión eléctrico de clase 8: un recorrido de larga distancia entre Stockton, California, y Laredo, Texas, considerado uno de los trayectos logísticos más exigentes de Estados Unidos.
De acuerdo con reportes técnicos y publicaciones especializadas, el Windrose R700 cruzó más de 2,300 kilómetros atravesando zonas montañosas, climas mixtos y distintos niveles de altitud, una ruta que normalmente desafía incluso a los tractocamiones diésel.
El objetivo fue medir desempeño, autonomía, consumo energético, eficiencia del frenado regenerativo y el comportamiento térmico de su batería de 729 kWh en situaciones reales.
Los ingenieros documentaron:
- Consumo energético promedio estable, incluso en puertos de montaña.
- Gestión térmica eficiente, sin caídas de potencia por sobrecalentamiento.
- Recargas rápidas con cargadores de alta potencia, manteniendo continuidad operativa.
- Confiabilidad en tramos prolongados sin pérdida de rendimiento, clave para flotas que operan con ventanas de tiempo estrictas.
La llegada a Laredo, Texas, marcó un hito para la marca: Fue la primera demostración pública de que su plataforma eléctrica podía integrarse a corredores de comercio real y no únicamente a rutas urbanas o regionales de corta distancia.
Este recorrido también abrió la puerta para que empresas transfronterizas —incluida GreenSpace E-Mobility— evaluaran la viabilidad de adaptar rutas México–Texas a tecnologías cero emisiones. La prueba Stockton–Laredo se convirtió así en el antecedente directo del modelo operativo que ahora conectará Laredo–Colombia–Monterrey con los primeros cinco camiones eléctricos.
Cómo encaja esta ruta en la estrategia de nearshoring
El corredor eléctrico Laredo–Colombia–Monterrey forma parte de un ecosistema más amplio:
- Texas trabaja en corredores EV con TxDOT.
- Puente Colombia avanza en infraestructura digital y ampliaciones aduaneras.
- Parques logísticos neoleoneses integran micro-redes y almacenamiento energético.
- Empresas del I-35 buscan reducir costos operativos por emisiones.
Para las compañías que exportan desde Nuevo León, los beneficios potenciales son:
- Incentivos de carbono
- Certificaciones verdes para cadenas de suministro
- Reducción de costos de mantenimiento
- Menor dependencia del diésel en picos de precio

Lo que viene en la ruta piloto
GreenSpace confirmó que en esta primera etapa se contemplan:
- Cinco camiones operando la ruta Laredo–Colombia–Monterrey
- Pruebas de autonomía, consumo energético, telemetría y carga
- Tres estaciones de carga estratégicas (incluyendo una de alta potencia en NL)
- Evaluación de compatibilidad regulatoria entre CFE y ERCOT
- Integración con plataformas de aduanas digitales
Una expansión a rutas Laredo–Dallas y Laredo–Houston está considerada para la segunda fase.
Impacto para la frontera
Si el piloto se consolida, la región podría convertirse en el primer nodo eléctrico de comercio internacional entre México y Estados Unidos.
Laredo, Puente Colombia y Monterrey serían los ejes de una red que transformaría la logística norteamericana en la década del nearshoring.






