En el tramo más solitario y de mayor riesgo de la carretera Ribereña, entre Ciudad Guerrero y Nuevo Laredo, el proyecto de Estaciones Seguras de Tamaulipas aún no despega. Aunque el plan contempla tres instalaciones de seguridad en esa franja, ni siquiera se ha liberado el terreno para la primera, confirmó la Secretaría de Obras Públicas estatal.
El objetivo de estas bases es ofrecer vigilancia permanente, atención a emergencias y refugio temporal a quienes circulan por una de las rutas más transitadas por transportistas y viajeros del norte del estado.
Avance en el resto del estado
De las 15 Estaciones Seguras proyectadas en la frontera tamaulipeca, las ubicadas en Reynosa Norte, Valadeces (Díaz Ordaz), Camargo y Miguel Alemán ya se encuentran en la fase final de obra externa.
Según el titular de la dependencia, Pedro Cepeda Anaya, los trabajos se extenderán hasta 2026, año en que se prevé la conclusión de todas las edificaciones. Cada estación será equipada con sistemas de monitoreo y personal de la Guardia Estatal para su operación permanente.
En total, el gobierno estatal ha destinado 869 millones de pesos para esta infraestructura de seguridad, además de 565 millones invertidos en años anteriores en obras similares, como el Complejo de Seguridad de San Fernando y la Ciudad Judicial de Victoria.
¿Qué comprende una Estación Segura?
Una Estación Segura está diseñada como un punto de resguardo y vigilancia en carretera, con infraestructura tipo cuartel y servicios para los automovilistas:
Características principales
- Dormitorios y comedor para hasta 30 elementos de seguridad.
- Sala de monitoreo y comunicación con otras bases.
- Espacios de atención ciudadana y recepción blindada.
- Área para auxilio vial o primeros auxilios.
- Vehículos de patrullaje y cámaras perimetrales.
Estas instalaciones estarán distribuidas cada 25 a 30 kilómetros a lo largo de la Carretera Ribereña, desde Nuevo Laredo hasta Camargo, reforzando la cobertura de seguridad en una zona históricamente desatendida.
Conclusión
Mientras en otros municipios las obras avanzan con ritmo constante, el tramo Guerrero–Nuevo Laredo sigue siendo el gran pendiente del proyecto, sin predios definidos ni fechas claras para el inicio de construcción.
La meta estatal de concluir todas las estaciones en 2026 dependerá de que esta parte clave de la Ribereña logre destrabarse en los próximos meses.
