Como Gerardo Ramírez, de 35 años y originario del estado de Guanajuato, fue identificado el migrante que perdió la vida ahogado en el río Bravo, cuyo cuerpo fue recuperado el pasado 8 de octubre por elementos de la Dirección de Protección Civil y Bomberos.
Con este caso, suman tres las víctimas registradas en lo que va de 2025, la cifra más baja en más de cinco años, según confirmó el comandante de Bomberos, Lino Sosa Gutiérrez.
El funcionario detalló que la tendencia representa un cambio significativo respecto a años anteriores: en 2024 se contabilizaron ocho fallecimientos; en 2023, nueve; en 2022 fueron diez; en 2021 se registraron 20, y en 2020 y 2019 la cifra alcanzó 13 víctimas. En 2018 se reportaron 17 personas ahogadas.
“Estamos viendo resultados positivos de las acciones de prevención que se han reforzado en coordinación con diferentes sectores”, señaló Sosa Gutiérrez. Explicó que entre las medidas implementadas destaca la colaboración con grupos de pescadores locales, quienes realizan labores de concientización en parques y puntos cercanos al cauce del río.
El objetivo principal —dijo— es disuadir a las personas migrantes de intentar cruces ilegales por zonas de alto riesgo. A ello se suma el incremento en la vigilancia fronteriza del lado estadounidense, lo que ha contribuido a reducir los intentos de cruce por el río Bravo.
El comandante reiteró el compromiso de seguir fortaleciendo las estrategias de prevención, información oportuna y monitoreo constante de las zonas críticas.
Finalmente, las autoridades hicieron un llamado a la población migrante a no arriesgar la vida al intentar cruzar el río y optar por vías legales y seguras para ingresar a territorio estadounidense.